El embarazo es una de las etapas más preciadas de la vida, pero durante el proceso de gestación pueden darse ciertas molestias a nivel muscular y en las articulaciones. Existen dos causas principales por las que aparecen, que son las hormonas y el aumento de peso. Por ello es tan importante que, incluso en la etapa de gestación, llevemos a cabo ejercicio diario a ser posible.
En este artículo te contamos qué ocurre con los músculos y las articulaciones durante esta etapa, qué molestias se pueden sentir y cómo el ejercicio físico puede contribuir a un embarazo más saludable. ¡Sigue leyendo!
Qué ocurre en los músculos y las articulaciones durante el embarazo
Debido al aumento de peso y a las hormonas, durante la etapa de gestación se pueden producir molestias en los músculos y las articulaciones. Esto está causado por la presión que se ejerce en las rodillas por el propio aumento de peso e incluso la retención de líquidos puede generar un hormigueo, adormecimiento y molestias en los dedos.
En cuanto a las hormonas, durante el embarazo el cuerpo segrega algunas que suelen ablandar y distender las articulaciones de la pelvis para así dar mayor espacio al útero a medida que este va creciendo. Esto desencadena la presión en otras articulaciones como las rodillas, los tobillos y las muñecas. En realidad, todo el proceso es una cadena que genera otros efectos secundarios. Las consecuencias del aumento de peso suelen notarse principalmente durante el tercer trimestre del embarazo y genera la sobrecarga de los músculos y de las propias articulaciones. En algunos casos, esto puede dar como resultado el hinchazón y entumecimiento de pies, manos o tobillos.
Pero, en todo caso, un mantenimiento del ejercicio físico puede contribuir con grandes beneficios durante el embarazo. ¡Te los contamos!
Ejercicio físico para contribuir a la salud muscular y articular durante el embarazo
La mejor forma para evitar estas dolencias durante la etapa del embarazo es realizar y mantener una rutina de ejercicio físico siguiendo las indicaciones adecuadas. Es aconsejable realizar ejercicios de bajo impacto y sus principales beneficios son:
- Reducir los dolores de espalda, estreñimiento, la distensión estomacal y la hinchazón.
- Prevenir el aumento excesivo de peso.
- Promover el tono muscular, la resistencia y la fuerza.
- Contribuir a hacerte sentir de mejor ánimo y tener un sueño de calidad.
Incluso, mantener una rutina de ejercicio físico durante el embarazo influye en la posibilidad de tener un trabajo de parto más breve.
Para la mayoría de mujeres embarazadas se recomienda realizar un mínimo de 30 minutos de actividad diaria de bajo impacto e intensidad moderada al día. Algunos de los ejercicios que se pueden realizar son el pilates en el embarazo, caminar, natación o yoga. Estos cuatro deportes son ideales para realizar durante la etapa de gestación, ya que son de intensidad suave y moderada y no requieren de gran esfuerzo físico que dañe al futuro bebé. El pilates y el yoga para embarazadas contribuyen a aumentar la fuerza y mejoran la flexibilidad y la agilidad.
La natación contribuye a mejorar también tu musculatura, favorecer la circulación sanguínea y, además, mejorar la resistencia pulmonar. Por si fuera poco, realizar un deporte acuático durante el embarazo también te proporciona un alivio inmediato al pesar menos tu cuerpo en el agua. Asimismo, caminar también favorece la movilidad de las articulaciones y mejora la circulación sanguínea.
Otro de los ejercicios es usar la pelota para embarazadas. Es un ejercicio que se usa mucho en la gimnasia prenatal y que fomenta la movilidad de las articulaciones. Además, también trabaja el suelo pélvico preparándolo para el momento del parto, favorece la elasticidad de los músculos y trabaja el abdomen. Por supuesto, al realizar cualquier ejercicio se debe mantener una buena postura.
De esta forma, con todas estas opciones de ejercicios físicos durante el embarazo, favorecerás la movilidad de músculos y articulaciones y evitarás padecer dolencias y molestias en ellas, así como el hinchazón o entumecimiento.
Algunas recomendaciones
Por supuesto, la clave para evitar molestias durante los músculos y articulaciones durante el embarazo, como hemos visto, es mantener una rutina de ejercicio físico diario. Sin embargo, existen otras recomendaciones y consejos a tener en cuenta.
El descanso después de realizar ejercicio es fundamental y un pequeño truco es mantener las piernas y los pies en alto durante un rato, para así fomentar la circulación sanguínea y evitar la hinchazón. También usar una faja alrededor de la cintura puede ayudar a distribuir mejor el peso de la barriga durante el embarazo.
Otros remedios para aliviar molestias son aplicar frío o calor si se sienten algunas zonas afectadas y realizar masajes con un complemento externo como una crema aplicada por vía tópica. Realizar masajes diarios, incluso si es a ti misma, tiene excelentes beneficios.
A la hora de hacer ejercicio, es importante introducir complementos que ayuden a prevenir posibles lesiones. La crema de Fisiocrem Gel Active es una excelente opción, ya que actúa como preparación muscular y relaja los músculos y articulaciones de la zona en la que se aplica. Además, está formulada a partir de ingredientes naturales como la árnica, la caléndula, el hipérico o la melaleuca.
Ahora que ya sabes cómo afecta el embarazo a los músculos y articulaciones y los beneficios que proporciona el ejercicio físico, aplica los consejos mencionados, mantente activa y disfruta de esta etapa tan bonita de la vida.
