¿Has notado alguna vez hinchazón, picor o pesadez en las piernas? Si es así, lo más probable es que tengas insuficiencia venosa crónica, más conocida popularmente como varices. Las varices son causadas por una acumulación de sangre fuera de lo normal en las venas. Como consecuencia de eso, las venas se dilatan y estas sobresalen de la piel. La mayoría de las varices se concentran en las piernas y son visibles con un tono entre rosado y morado.
Cuando se da un caso de venas dilatadas por acumulación de sangre, estas pueden manifestarse como venas varicosas o varices. Sin embargo, también es posible encontrarse con arañas vasculares, cuyo tamaño es más pequeño. Principalmente se concentran en las piernas, pero también es posible encontrar casos de venas dilatadas en otras partes del cuerpo como el ano, con las conocidas -y a la vez dolorosas- hemorroides.
El dolor de varices está muy asociado a las mujeres, pero también hay hombres que las padecen. El hecho de que sea más visible en mujeres que en hombres se explica porque hay un mayor número de hombres asintomáticos que las padecen y que no las tratan. Pero, de igual forma, las varices en hombres se deben a un problema de circulación e igualmente pueden provocar serios problemas a largo plazo si no se les presta atención.
Síntomas de las varices
La mayoría de las varices son visibles, con el problema estético que eso implica para quienes las padecen. Pero, más allá del inconveniente estético que provocan, también manifiestan una serie de dolores musculares muy molestos, por lo que aliviar el dolor de las varices en las piernas se convierte en una prioridad.
La dolencia más conocida es la sensación de pesadez en las piernas. Como las varices provocan alteraciones en la correcta circulación de la sangre en las piernas se produce esa sensación, que no solo es incómoda, sino también dolorosa y en casos extremos puede dificultar hasta el caminar.
Como consecuencia de la anormal circulación de la sangre por las venas, esta se obstruye y provoca hinchazón en pies y tobillos. También es posible sentir picores en zonas donde se acumula la sangre.
Al hacer un movimiento brusco, la pierna con dolor de varices también puede sufrir calambres. En caso contrario, tras no mover la pierna durante un buen rato, se produce la sensación de acorchamiento o de hormigueo.
Las varices, en los casos más extremos y crónicos, puede ocasionar úlceras venosas, sangrado de la piel y un oscurecimiento en las zonas más críticas.
Causas que motivan la aparición de las varices
Existen varias causas que propician la aparición de las varices y son las siguientes:
- Varices por válvulas defectuosas: las válvulas son las encargadas de hacer circular la sangre hacia el corazón. Si no funcionan correctamente, provocan la acumulación en las venas y eso comporta la aparición de varices.
- Sedentarismo: la gente que por motivos médicos ha estado mucho tiempo en cama reposando, es probable que padezca la formación de trombos o coágulos en las piernas y eso haga aparecer varices.
- Mucho tiempo de pie: las personas que por su trabajo están mucho tiempo de pie, también tienen probabilidades de que les aparezcan varices. Aunque normalmente se recomienda hacer ejercicio para combatirlas, estar mucho tiempo de pie también afecta a la normal circulación de la sangre.
- Embarazo: a algunas mujeres embarazadas les aparecen varices. Sin embargo, suelen desaparecer unas semanas después del parto y no son permanentes.
Consejos para aliviar el dolor de las varices
Dado que muchas veces está asociado al sedentarismo, una de las mejores formas de aliviar el dolor de varices en las piernas es evitar precisamente ese sedentarismo. Es importante realizar acciones que faciliten y motiven la buena circulación de la sangre, como por ejemplo:
- Aplicar presión.
- Masajes.
- Poner frío en la zona.
- Usar medias de compresión y calzado o plantillas que reactiven la circulación
- Beber mucha agua.
- Consumir alimentos que mejoran la circulación en sangre como arándanos, fresas, jengibre, etc.
Hacer ejercicio o pasear un poco cada día también son acciones que contribuyen muy positivamente a prevenir las varices.
También es importante llevar un estilo de vida saludable en la alimentación. Una dieta basada en comidas copiosas y grasientas no ayuda. De hecho, del sobrepeso y la obesidad derivan muchas veces los peores episodios de varices. En cuanto a la ropa, lo mejor es no llevar siempre ropa muy apretada o tacones altos en el caso de las mujeres.
Otra recomendación para tratar las varices son los productos de farmacia indicados para reducir la inflamación. El Spray Active Ice de Fisiocrem puede ayudar en el dolor gracias a su efecto frío. Uno de los remedios más efectivos para tratar el dolor de varices es aplicar frío en la zona afectada. Este spray de Fisiocrem reduce la temperatura de la zona un 14% y así la mantiene durante un buen tiempo. De esa forma, la sensación de pesadez se reduce y el dolor se mitiga de manera efectiva.
